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Lore
Guantes de celestina (majestuosos)
La cría de seis brazos
Eido reunió a las crías a su alrededor. Ya era tarde y se resistía a dejarlos vagar por las calles durante la noche. Así que los atrajo de vuelta al campamento con la promesa de viejas leyendas de los eliksni.
"Hubo una vez una cría", comenzó, una vez que se habían calmado, "que nació con seis brazos". Eido utilizó la parte superior de sus brazos para señalar el punto que había debajo de los inferiores. "Y toda la nidada se burló de él por ello".
Las crías murmuraron con conocimiento de causa. Muchos de ellos habían experimentado burlas también.
"Cuando la cría creció lo suficiente, compitió con sus hermanos por éter y estatus en su Casa. No era tan inteligente ni tan fuerte como el resto de la de nidada, incluso con un par de brazos adicionales, así que el kell de su Casa lo declaró un escoria".
Las crías asintieron con conocimiento de causa. Ellos también habían oído historias de escorias, aunque Misraaks había prohibido esta práctica en la Casa de la Luz.
"Pero", continuó Eido, elevando su tono, "cuando llegó el momento de que el kell de su Casa amputara sus brazos más bajos, ¡la cría se alegró!". Levantó las manos en señal de celebración. "Porque tenía un par de brazos más para dar. Ese día, se convirtió en el único escoria de su Casa con cuatro brazos, y estaba orgulloso".
